El presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunció que Bielorrusia recibirá sistemas de misiles balísticos Iskadner-M con capacidad nuclear en menos de un mes. Estos misiles septuplican la velocidad del sonido, burla los sistemas antimisiles y puede llegar a cobijar en su interior cabezas nucleares. Dirigiéndose al presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, declaró: «Como usted y yo acordamos, usted estaba pidiendo esto, y tomamos una decisión. En los próximos meses, proporcionaremos a Bielorrusia sistemas de misiles tácticos Iskander-M que, tal como es conocido, pueden usar misiles balísticos y de crucero tanto en las modificaciones estándar como nucleares”.

El 10 de mayo, Lukashenko dijo que Bielorrusia desarrollaría un nuevo sistema de misiles balísticos junto con Rusia basado en el iskander. En ese momento, también indicó que el ejército bielorruso estaría equipado con Iskanders «listos para usar» adquiridos de Rusia. Ahora estos acuerdos de hace poco más de un mes se han concretado.
El Iskander-M (SS-26 Stone para la OTAN) es un sistema de misiles balísticos móviles que viene a sustituir a los Scud soviéticos, que fueron principalmente utilizados durante la Guerra Fría. Utilizados por primera vez -en combate- en Georgia en el año 2008, el Kremlin anunció que los desplegaría en la provincia de Kaliningrado en 2015, como respuesta a otro despliegue por parte de EE UU. Rusia los ha usado a escasos kilómetros de Ucrania, en la región de Belgorod, en plena ofensiva contra las tropas del régimen de Kiev en el Donbás y también contra la frontera norte con Bielorrusia. Los Iskander-M se transportan y lanzan desde un vehículo que puede albergar hasta dos misiles, y puede lanzarlos con menos de un minuto de diferencia. Después, tiene que ser recargado. El misil mide unos 7,3 metros de largo y 0,92 de diámetro, y pesan entre 3.800 y 4.200 kilogramos. La ojiva, por su parte, pesa alrededor de 480 kilogramos. El Iskander está diseñado para escapar a los sistemas de defensa antimisiles, ya que vuela en una trayectoria baja y maniobra durante el vuelo, llegando a alcanzar objetivos que están en torno a 415 km, pero puede llegar a los 500 km. La precisión de estos misiles es de 2 a 5 metros, según el Centro de Estrategia Estratégica y Estudios Internacionales (CSIS).

Cuenta con una velocidad máxima entre 6 y 7 veces la del sonido (7.400 a 8.600 kilómetros por hora), pueden alcanzar una altitud de vuelo de entre 6 y 50 kilómetros. Una de las claves del Iskander-M es la diversidad de ojivas que puede utilizar. Pueden transportar cabezas nucleares, bombas termobáricas, de fragmentación explosiva, de penetración y de pulso electromagnético.