Todo esto encaja en una agenda que ha sido planificada durante décadas por antiguas familias adineradas como las de los Rockefeller y Rothschild. Brzezinski lo llamó el fin del estado nación soberano. David Rockefeller lo llamó «un gobierno mundial». George H.W. Bush en 1990 lo llamó el Nuevo Orden Mundial. Ahora podemos ver mejor lo que planean imponer si lo permitimos.